Hoy en la #LaUniversidadFluye hablamos con Jesús Cisneros Aguirre, doctor en Oceanografía Física, profesor de Contaminación Marina y Oceanografía Costera en la Facultad de Ciencias del Mar de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Hablamos de vertidos, microalgas, la situación de nuestras costas y muchas cosas más.
Los vertidos de aguas residuales son desde hace años un grave problema para las administraciones canarias, a las que incluso ha amonestado por la Unión Europea (UE). El Gobierno reconoció el año pasado que en las islas hay unos 500 puntos de vertidos de aguas residuales al mar, la mayoría ilegales.
El tema en Canarias como en otras costas es muy grave.
Lo primero es depurar las aguas residuales que se vierten al mar. Esto solo se puede lograr con un cambio en la concepción de la gestión de aguas residuales que ahora mismo es centralizada. La gestión centralizada obliga a grandes inversiones que ahora mismo no podemos hacer y alarga la solución, a decenas de años. La administración no controla adecuadamente los vertidos a los cauces y la costa.
Los ciudadanos no se interesan por el cuidado de nuestras costas, solo hay que ver una playa después de un concierto o de un simple día de playa. Esto se transmite a todas las actuaciones de los usuarios en la costa. No se exige a la administración el cuidado ambiental y no es una preocupación real a la hora de elegir los representantes políticos.
Se invierte poco y mal, a pesar de los anuncios de las grandes inversiones que se proponen para los próximos años. Estas inversiones se centran en el traslado de agua residual que interesa demasiado a las empresas constructoras pero que no resuelven el problema. Con tecnología actual se puede ahorrar entre el 80 y 90 % de esas inversiones y lograr una depuración para obtener agua de calidad reutilizable con todas garantías en unos pocos años.
La depuración descentralizada es la única forma de abordar el problema, esta depuración se gestiona de forma centralizada que de forma tele-controlada vigila la red de depuradoras de menor tamaño, que permitan reutilizar el agua en el punto de vertido a la red. Con este sistema se ahorra dinero de inversión inicial y dependiendo de los casos permite reutilizar los sistemas instalados y multiplicar su capacidad hasta 10 veces.
Como ya digo la tecnología tiene ya más de 15 años en unas 2000 plantas en todo el mundo, lógicamente se va mejorando pero lo importante es que la depuración final permite evitar todos los problemas que se producen actualmente
En el ejemplo del problema de los Silos por ejemplo se podría ahorrar hasta el 90% de la inversión (de 14 millones a 1,4 millones de euros) propuesta por la administración con el sistema de concentración, y se realizaría en 1 año. La propuesta actual que ya se ha comenzado, tardará 10 años, más los retrasos habituales en estas grandes obras. Es decir, continuará el problema durante al menos 10 años. Creo que es un ejemplo revelador de cómo solucionar el problema.
Como ha habido una gran polémica con esto, que no creo que sea relevante, no voy a entrar en este tema, además solo el tiempo dirá que pasa. Pero el problema es que no tenemos tiempo, es necesario eliminar cuanto antes los vertidos ya que no solo hay problemas con bacterias flotantes, que son las más visibles y nos perjudican el disfrute de la playa, que al parecer es lo que más importa.
Todos los que estudiamos el mar y tenemos experiencia en costa estamos de acuerdo en que la situación es grave, se está destruyendo toda la ecología costera por varios motivos y uno de los más importantes es el vertido de aguas residuales sin depurar adecuadamente. Por ejemplo, se han perdido el 90% del número de peces en nuestras costas y ya hay especies de peces que están casi desaparecidas, y los tamaños de peces se han reducido drásticamente. Los sebadales se han reducido en algunas islas en torno al 70-80% en solo 10 años. Son datos incontestables y que sí nos deberían hacer cambiar de hábitos.
Jesús Cisneros: “Ahora creo que es imposible recuperar las condiciones de hace 50 años”.
El cuidado de la costa nunca ha sido una preferencia de nuestra administración ni de los ciudadanos, y ahora creo que es imposible recuperar las condiciones de hace 50 años. Lo que espero es que empiece a cambiar la tendencia para tratar de salvar algo de la calidad costera, y los ciudadanos somos los grandes responsables de ello. Hay que cambiar de hábitos y de mentalidad.
Sinceramente no espero ningún cambio en el 2018, ojala me equivoque.
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3 Comments
Deberíamos todos ser mas consciente y cuidar el medio ambiente
Exacto. Muchas gracias, Ivone. Esperamos que con entrevistas así, la gente se conciencie.
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