¿Por qué se celebra el Día Mundial del Retrete?
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¿Cuál es el reto del Día Mundial del Retrete 2017?

El Día Mundial del Retrete 2017 se enmarca dentro del tema del Día Mundial del Agua celebrado a principios de este año en torno a la temática de las aguas residuales. En este contexto, nos planteamos la siguiente pregunta: ¿A dónde van las heces? Para miles de millones de personas alrededor del mundo, los sistemas de saneamiento son inexistentes o inefectivos. Las heces llegan al medio ambiente propagando enfermedades mortales y socavando gravemente el progreso en materia de salud y supervivencia infantil. Aún en los países ricos, el tratamiento de las aguas residuales está lejos de ser perfecto, ocasionando que ríos y costas no sean seguros ni para la pesca ni para el disfrute.

Retos del Día Mundial del Retrete 2017

Para lograr el ODS 6, necesitamos que las heces de todos y cada uno sean contenidas, transportadas, tratadas y desechadas de forma segura y sostenible. Además del profundo impacto que ocasionan en la salud y las condiciones de vida, gestionar las aguas residuales de forma segura tiene un enorme potencial como fuente asequible y sostenible de energía, nutrientes y agua.

Datos y cifras del Día Mundial del Retrete 2017

  • Alrededor del 60% de la población mundial -4.500 millones de personas- no tiene acceso a un retrete en casa, o no tienen un retrete que permita la gestión de las heces de forma segura.
  • 869 millones de personas en el mundo practican la defecación al aire libre, y no cuentan con ningún acceso a un retrete.
  • 1.800 millones de personas utilizan una fuente de agua potable no segura y sin protección contra la contaminación por restos fecales.
  • A nivel mundial, el 80% de las aguas residuales generadas por la sociedad regresan al ecosistema sin ser tratadas o reutilizadas.
  • Únicamente 39% de la población global (2.900 millones de personas) utiliza un servicio básico de saneamiento administrado de forma segura, es decir, las heces se eliminan de forma segura in situ o se tratan fuera del emplazamiento.
  • Una buena higiene y una fuente de agua potable, en combinación con el saneamiento mejorado podrían prevenir cerca de 842.000 muertes cada año.

¿Qué son los “ODS”?

Los Objetivos para el Desarrollo Sostenible (ODS) son un conjunto de metas, objetivos e indicadores, firmados por todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas, cuyo objetivo es erradicar la pobreza extrema para el 2030. Colectivamente, estos objetivos proporcionan un marco –la Agenda 2030- a través de cual se encaminan todos los esfuerzos para lograr el desarrollo sostenible.

Heces, aguas residuales y ODS

El cumplimiento del ODS 6 – “Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos” – ayudará a impulsar el progreso en muchos otros ODS.

La meta ODS 6.2 nos exhorta a “de aquí a 2030, lograr el acceso a servicios de saneamiento e higiene adecuados y equitativos para todos y poner fin a la defecación al aire libre, prestando especial atención a las necesidades de las mujeres y las niñas y las personas en situaciones de vulnerabilidad”. El logro de este objetivo es esencial para mejorar la salud y la dignidad humanas.

Una mejor gestión de los desechos humanos es una parte clave para reducir el impacto de las aguas residuales con poco tratamiento en todos los niveles de la sociedad. El ODS 6.3, nos exhorta a “mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertimiento y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, reduciendo a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar y aumentando considerablemente el reciclado y la reutilización sin riesgos a nivel mundial”. El logro de esta meta es esencial para los sistemas hídricos y para crear medios de vida sostenibles.

La cadena del saneamiento: ¿A dónde deberían ir los excrementos?

La meta 6 de los ODS busca asegurar que cada uno tenga acceso y utilice “un servicio de saneamiento administrado de manera segura”. Esto se define, de acuerdo con el Programa Conjunto OMS/UNICEF de Monitoreo (PCM) del Abastecimiento de Agua y del Saneamiento, como “instalaciones privadas mejoradas donde los excrementos se eliminan de manera segura en el lugar o son transportados y tratados fuera del lugar”.

Gestionar nuestras heces de forma correcta, no implica solamente de evitar el peligro: sino también de aprovechar una oportunidad. Los excrementos tratados de manera segura y reutilizados, son ‘oro marrón’. Los “servicios de saneamiento administrados de manera segura” generan empleos, oportunidades de inversión y productos valiosos como energía y fertilizantes.

Incluir a las mujeres, quienes por lo general cuentan con un mayor conocimiento sobre la situación del saneamiento y el acceso al agua potable en sus comunidades, es clave para lograr el éxito de las nuevas instalaciones, y contribuye al empoderamiento de la mujer en la sociedad.

En diferentes contextos habrá también una variedad de enfoques para mejorar el saneamiento, y todos ellos necesitarán contar con un entorno político, económico y de gobernanza propicio y de apoyo. Sin embargo, los principios de cada etapa del proceso continuarán siendo los mismos.

  1. Contención

Los retretes en todo el mundo pueden adoptar muchas formas, desde los inodoros conectados a los sistemas de alcantarillado, hasta las simples letrinas, pasando por las instalaciones “ecológicas” que recogen la orina y utilizan las heces para producir composta en un tanque sellado. Sin embargo, no importa tecnología que se utilice en el sanitario, éste debe ser seguro, privado, accesible, apropiado, y debe contar con instalaciones para el lavado de manos, y prevenir de manera efectiva que los residuos humanos entren en contacto con la gente o el medio ambiente circundante. Algunas tecnologías proporcionan tratamiento y eliminación segura en el lugar y no necesitan transporte o tratamiento en otras partes.

  1. Transporte

Las cañerías o los servicios de vaciado de letrinas deben transportar las heces a las estaciones de tratamiento. En el mundo desarrollado, la eliminación de aguas residuales sigue siendo el método más eficaz para transportar las aguas residuales domésticas, comerciales e industriales. En los países en vías de desarrollo, los sistemas in situ son actualmente los más comunes, aunque es probable que conforme aumente el nivel de desarrollo, se constate un incremento en la eliminación de los desechos de agua. En pueblos y ciudades en particular, los sistemas in situ deben ser vaciados y transportados de forma regular para su tratamiento. Los servicios de vaciado deben proteger adecuadamente a los trabajadores del servicio de saneamiento y asegurar que los excrementos no sean derramados o vertidos antes de llegar al lugar en que serán tratados.

  1. Tratamiento

Las heces deben ser tratadas como parte de las aguas residuales y los desechos obtenidos de este proceso deben regresa al medio ambiente de forma segura.

Básicamente, existen tres formas de tratamiento de materias fecales: el tratamiento fuera de las instalaciones de alcantarillado, por ejemplo mediante el uso de tecnologías convencionales como la filtración y soluciones innovadoras; el tratamiento fuera del sitio de lodos fecales obtenidos por el vaciados de letri- nas o fosas sépticas, utilizando por ejemplo la estabilización con cal, el co-compostaje con residuos orgánicos sólidos municipales o la incineración; el tratamiento en el lugar y eliminación de lodos fecales, cubriendo y abandonando un pozo cuando está lleno, o almacenarlo hasta que el contenido sea seguro para su vaciado y utilizar por ejemplo, letrinas de fosas gemelas o letrinas de compostaje. En cualquier caso, el nivel de tratamiento debe ser el apropiado para su próximo uso o eliminación.

  1. Eliminación o reutilización

El tratamiento seguro de las heces puede ser utilizadas para generar energía o como fertilizantes para la producción de alimento.

El uso de aguas residuales tratadas con seguridad y subproductos de desechos en la agricultura y otros sectores, se considera cada vez más un método que combina el reciclaje de agua y nutrientes, aumentando la seguridad alimentaria de los hogares y mejorando la nutrición de los hogares pobres. El creciente interés en el uso de aguas residuales es impulsado por la escasez de agua y nutrientes. Sin embargo, se necesita atención para mitigar los riesgos para la salud y el medio ambiente.

Día Mundial del Retrete 2017, ¿A dónde van las heces?

FUENTE: un.org

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